Ricardo Castro

1864 - 1907
Danza frívola, Gavotte et mussete, Impromptu en forma de polca, Nostalgia, Preludio op. 18, Sarabanda, Vals intimo

Sobre Ricardo Castro

Ricardo Castro Herrera (1864-1907) fue un notable compositor y pianista mexicano, considerado el último romántico de la época de Porfirio Díaz. Nacido el 7 de febrero de 1864 en Hacienda de Santa Bárbara, Durango, Castro mostró un talento excepcional para la música desde una edad temprana. Comenzó su educación musical con Pedro H. Ceniseros y, en 1879, su familia se trasladó a Ciudad de México, donde ingresó en el Conservatorio Nacional de Música y estudió piano con Juan Salvatierra y Julio Ituarte, y armonía y contrapunto con Melesio Morales. Completó sus estudios en solo cinco años, la mitad del tiempo habitual, y se graduó en 1883.

Castro inició su carrera musical como pianista de concierto y compositor antes de finalizar sus estudios. A los 19 años, completó su Primera Sinfonía en Do Menor, aunque esta obra no fue estrenada hasta 1988, 81 años después de su muerte. En 1883, el gobierno de México seleccionó algunas de sus obras para enviarlas a Venezuela con motivo del centenario de Simón Bolívar. En 1884, realizó una gira de conciertos por Estados Unidos.

En 1896, se estrenó el primer acto de su ópera «Atzimba», aunque el segundo acto se ha perdido. Gracias a una beca del gobierno mexicano, Castro viajó a Europa de 1903 a 1906, donde dio clases magistrales en conservatorios de París, Bruselas, Roma, Milán y Leipzig. Durante su estancia en Europa, estudió con la pianista Teresa Carreño y publicó varias danzas mexicanas para piano en estilo habanera.

Al regresar a México, fue nombrado director del Conservatorio Nacional de Música por Justo Sierra, cargo que ocupó hasta su muerte en 1907 debido a una neumonía en Ciudad de México. La música para piano de Castro se caracteriza por su colorido y sentimentalismo, con una especie de virtuosismo al estilo de Liszt, a menudo conectando diversos temas musicales en pasajes brillantes.

Ricardo Castro dejó un legado significativo en la música clásica mexicana, destacándose por su habilidad para fusionar el romanticismo europeo con elementos de la música tradicional mexicana, contribuyendo así al desarrollo de una identidad musical nacional.

Ricardo Castro – Vals Íntimo

Ricardo Castro – Sarabanda

Ricardo Castro – Preludio op. 18

Ricardo Castro – Nostalgia

Ricardo Castro – Impromptu en forma de polca op. 28 nº 2

Ricardo Castro – Gavotte et Mussete